Aquí os voy a dejar unas cuantas reseñas de lo vivido en el centro Aloe Vera desde la visión de los alumnos.
Vamos con la primera:
Ayer, la clase de 4º eso tuvo el enorme placer de asistir al centro Aloe Vera para una relajante sesión de yoga. Los ejercicios eran sencillos, fáciles de seguir y realizar; la mayoría con el fin de relajar nuestros músculos y mente. Trabajamos la respiración, brazos, piernas, espalda… y conseguimos contactar con nuestro yo interior conociéndonos un poquito más. Además de darnos unos excelentes consejos para vivir con alegría y salud y mostrarnos unos pasos a seguir en caso de tensión por los exámenes. Al principio no me sentía muy segura con lo que estaba haciendo, si lo hacía bien, para qué serviría, etc… pero luego me fui soltando y me relaje con la música y la voz de la profesora.
Después de la clase no podía sentirme mejor, apenas sentía el peso de mis piernas o dolor de cabeza. Me encontraba como nueva, lista para afrontar lo que quedaba de día con optimismo. En mi opinión, aunque el yoga no te llame la atención, es algo que todos deberíamos probar al menos una vez en nuestra vida. Es una experiencia más de valor incalculable. Da igual que no te divierta o que te parezca aburrido, porque el resultado te hará cambiar de opinión seguro. Es solo entrar en la estancia y tu mente se despeja, la música tranquila y pausada, la decoración alegre, las plantas; incluso el aire cambia. No podría estar más satisfecha con la actividad, de la cual no tenía muchas expectativas pero que me encantó. Es algo que siempre recordaré con cariño de mis años de estancia en el colegio.
Por último, agradecer a la maravillosa instructora de yoga que nos acogió con una sonrisa en la cara y nos transmitió su optimismo. No hubiese sido para nada lo mismo con otra persona. Muchas gracias.
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